Sacha

Ahora estás allí arriba, observando todo lo que hacemos mientras comes pollito y chocolate
Pero un día estuviste en la puerta de casa esperando nuestra llegada, un día estuviste a la salida del colegio para recogernos, un día estuviste en el aeropuerto sin saber muy bien qué pasaba pero con tu naricita rastreando nuestro camino, un día estuviste en la ventana con la ilusión de saber que volveríamos siempre con un huesito… El día que tu corazón dejó de latir una parte del nuestro también se paró, te lo regalamos para que te fueras acompañada y supieras que aún estando en el cielo cumpliríamos nuestra promesa de cuidarte hasta el final. Hoy entendimos que no fuimos nosotros quienes te cuidamos y te hicimos feliz, fuiste tú quien cuidó cada día de nosotros y nos protegiste como si fuéramos tu vida entera, fuiste tú quien hizo estos quince años nuestra vida más feliz
Te dejamos ir porque sabíamos que ya habías cumplido tu propósito aquí en el tierra, Dios te necesita ahora más que nosotros
Tus hermanas siempre quisieron tener un ángel que las protegiera y cuidara en el camino, tú quisiste asumir ese papel porque no hay nadie en el mundo que pueda cuidarlas mejor que tú
Mamá siempre te va agradecer que la hayas salvado y hayas sido su compañía día a día
Para papá siempre serás su pequeña, su mejor catadora de comidas y el amor más sincero y puro que pudo tener
Tus hermanas siempre quisieron otro hermanito, tú fuiste su mejor regalo
Espéranos allí, te prometemos que al llegar serás la primera que iremos a buscar, hasta entonces visítanos en sueños y cuéntanos cómo te va en el cielo bolita